En medio de la abundancia material de los países ricos, emerge en su población un fenómeno de reacción: cada vez más personas se sienten atrapadas en una profunda incertidumbre existencial y crisis de valores. Así, la prosperidad material va ligada a un empobrecimiento espiritual y existencial, perdiendo el acceso a los valores reales de la vida. La cohesión y la responsabilidad personal, valores positivos para nosotros y la sociedad, quedan al margen y prevalecen la frialdad, el aislamiento, la soledad, el desánimo y la indiferencia. En esta obra, Alexander Batthyány analiza las causas y las razones de este fenómeno. La lectura de estas páginas ofrece claves para salir de esta indiferencia, orientadas a la práctica y basadas en diferentes evidencias científicas. Para el autor, todo ser humano está llamado a entrar en la corriente de la vida y participar de la realidad y sus posibilidades, involucrarse y ser receptivo, porque, en efecto, nuestra riqueza no viene de lo que recibimos, sino de lo que estamos dispuestos a dar.