Algo tan sencillo como sentarte en el cine con tu padre, o con tu hijo, se convierte en este libro en una reflexión divertida, íntima y conmovedora. Las películas que no vi con mi padre son también las películas que sí viste, y las que quieres ver con tu hijo y por extensión, con todos a los que quieres. Alberto Moreno salta de Indiana Jones a La guerra de las galaxias con humor y con inteligencia, y va construyendo el relato de las cosas importantes: la infancia, la amistad, el amor o la familia delante de una pantalla junto a la mejor compañía posible. O junto a su ausencia. Porque la vida enseña que somos también porque otros fueron; una amalgama de nostalgia y de memoria que nos sujeta cuando nos quedamos solos.El autor nos habla de nosotros mismos, con la naturalidad de una conversación entre amigos sobre las escenas favoritas de Antes del atardecer o de El Padrino, esas imágenes de las películas compartidas por una generación cuyas emociones atrapan a todos por igual. Las páginas de Las películas que no vi con mi padre son un homenaje a los afectos, al dolor de las pérdidas irreparables y a cómo pasado y presente se encadenan hasta forjar una biografía sentimental.