Su investigación se ha desarrollado en la intersección entre la ética y la estética, en particular la relación entre racionalidad práctica y racionalidad estética. En Las razones del arte, Gerard Vilar propone entender el mundo del arte como un mundo de razones, es decir, defiende que son las interpretaciones, los argumentos críticos, las discusiones estéticas... los que hacen posible la existencia de obra de arte. Incluso el pluralista y aparentemente arbitrario o irracional arte actual existe en el seno de prácticas comunicativas que permiten comprender cada propuesta. El autor mantiene que la especificidad de las razones estéticas estriba en que la inteligibilidad de cada obra de arte está acompañada del reconocimiento de otras posibilidades, del carácter abierto de la experiencia estética.