Los Amantes de Teruel es obra romántica en el fondo y en la forma. Recoge una tradición nacional llevada ya a la escena por Rey de Artieda, Tirso y Pérez de Montalbán. La fuerza del amor mueve a los personajes y ocasiona su desdicha, por amor mueren Isabel y Marsilla, se venga Zulima, amenaza Azagra y peca doña Margarita. Problema de honor es el proyectado lance entre don Martín y don Pedro, el de doña Margarita y la deshonra familiar, el del Sultán quien liberta a Marsilla y da muerte a la esposa infiel. Finalmente, honor, virtud y sentido del deber dictan a Isabel a rechazar a Marsilla.La ficción se entrelaza con el fondo histórico de la España medieval.