«Vanessa sintió una explosión entre sus piernas. Palpitante. Ardiente. Ver a Henrik tan cachondo la excitó. Que la tocaran dos tigres y un dragón también la ponía cachonda. Había manos por todas partes. En ella. Dentro de ella. Acompasó sus movimientos. Estaba empapada».Tal y como les prometió tras su primer encuentro, Anastasia conduce a Vanessa y Henrik a un templo más alejado. Junto con los habitantes de la zona, participarán en un ritual legendario en el que la lujuria es el hilo conductor.-