El matemático Manuel Sadosky (1914-2005) tiene ganado un merecido reconocimiento en la historia de la ciencia como "Padre de la computación en Argentina". Su nombre suele aparecer asociado a Clementina, la descomunal computadora valvular que, junto a un pequeño grupo de científicos, fueron, en 1961, los primeros habitantes de la Ciudad Universitaria, entonces sólo un páramo bordeado por el río, en el extremo norte de la ciudad de Buenos Aires. Sin embargo, Manuel Sadosky desborda los límites de la computación. En sus textos, en sus acciones públicas, indisolublemente entramadas con la historia de la Argentina del siglo XX, en la coherencia que le imprimió a su vida y en los sentimientos que despierta en quienes compartieron con él tramos de sus existencias, aparece un multifacético Manuel para armar. Aprovechando la excusa que nos ofrece el centenario de su nacimiento, este libro pretende acercar al público toda esa multiplicidad de aspectos que terminan por conformar el retrato más completo de quien el escritor Tomás Eloy Martinez calificó como "nuestra esperanza y nuestra conciencia". El libro se abre con un riguroso estudio de Pablo Jacovkis que enlaza las circunstancias de la vida de Sadosky con la compleja historia de la Argentina del siglo XX, contiene además la más completa entrevista que se le haya realizado y convoca las voces de decenas de personas para componer un retrato de Manuel Sadosky que refleja los sueños, las convicciones, la conducta y el accionar de lo que fue: ni más ni menos que un Maestro. "Manuel Sadosky fue un verdadero gigante de la ciencia, capaz de enfrentar molinos de adversidad con pasta de soñador, pero también astucia, constancia, firmeza, humor, paciencia y dulzura. Protagonista indiscutido de la historia nacional del siglo XX, maestro, investigador y funcionario, advirtió con una claridad envidiable cuáles eran los caminos que nos llevarían hacia el futuro." Del prólogo de Nora Bär