Un narrador protagonista anónimo en primera persona omnisciente cuenta la historia de su matrimonio con Morella, una culta y extraña mujer que lee y profundiza en las prohibidas páginas del misticismo. Sus sentimientos hacia ella habían sido siempre extraños e indefinibles, el narrador sabe que nunca sintió amor por Morella. Como resultado de sus prácticas y lecturas, logró la inmortalidad de su alma, pero su forma física había empezado a deteriorarse cada vez más, por lo tanto pasa su tiempo en su cama hablando con su marido y enseñándole las artes oscuras que había aprendido. Él estaba sumamente asustado por las palabras de Morella y en secreto le deseaba la muerte, pese a que intentaba disimularlo todo el tiempo. Finalmente, muere durante el parto, pero su alma pasa a habitar en el cuerpo de la hija de ambos. Morella, antes de morir le dice al narrador, su marido, que nunca fue amada por él, por consiguiente, después de la muerte sería amada por él con un amor perfecto y puro.