En 2016, a la edad de sesenta años, la escritora Cory Taylor supo que el cáncer que padecía desde hacía diez años se hallaba en fase terminal. Cuando se enteró de que su muerte era inminente, escribió este libro en tan solo dos semanas, con la urgencia y la sinceridad de quien sabe que le queda muy poco tiempo de vida. Sin sentimentalismos y con dosis de humor, Taylor repasa, en Morir, la compleja historia de sus padres, cómo vivieron y cómo murieron, hace balance de su vida y, sobre todo, se sirve de su experiencia para meditar abiertamente sobre la propia muerte, aquel «monstruo silencioso» que a todos nos concierne pero que al que raramente nos atrevemos a mirar a la cara. Como El año del pensamiento mágico de Joan Didion, Morir es una obra de hondo calado literario que ilumina, en clave autobiográfica, una zona de la experiencia humana que el discurso secular y la medicina moderna han convertido en un tabú. El testimonio de Taylor nos ofrece una conmovedora lección sobre cómo afrontar nuestra muerte con valentía, pues, como nos recuerda la autora una y otra vez, no hay vida digna de ese nombre que no sea un diálogo permanente con la muerte. «Cuando te estás muriendo, puedes experimentar una especie de ternura incluso por tus recuerdos más desdichados, como si la dicha no sólo estuviera destinada a los momentos más hermosos, sino entrelazada en tus días como un hilo de oro.» Cory Taylor