Bajo el lema «Los caminos de hierro», José de la Luz y Caballero propuso educar a los jóvenes en el principio de la necesidad de establecer relaciones armónicas con la naturaleza, para utilizar racionalmente sus recursos y, al mismo tiempo, dar más garantía al desenvolvimiento de la vida humana. También expresó el interés por adquirir medios de transporte eficientes y seguros, entre ellos el ferrocarril, y optó por el uso del carbón mineral como fuente energética principal en las fábricas y talleres, pero siguiendo determinadas normas de seguridad para evitar daños al ambiente y a la salud humana. A través de estos artículos «Los caminos de hierro», editados en este cuarto volumen de las Obras de José de la Luz y Caballero, este sobresaliente pensador afirmó que el desarrollo de algunos países del norte de América estimulaba la necesidad, entre sus naciones, de dedicarse al ocio y al lujo en el tiempo libre. Bajo ese principio, defendió la idea de animar las visitas de los viajeros de esas regiones, pues Cuba les ofrecía la oportunidad de esparcimiento por la calidez del clima y la belleza de su naturaleza, razón por la cual propuso la ampliación de las redes ferroviarias para obtener nuevas fuentes de ingresos económicos para el país. En esta publicación también se recogen ensayos con temas de índole más literaria como el de la vida de Schiller, apuntes sobre la biografía de la condesa de Merlin, la obra literaria de Gertrudis Gómez de Avellaneda y un artículo sobre Cartas a Elpidio de su coetáneo Félix Varela. La presente edición de las Obras de José de la Luz y Caballero contiene notas provenientes de las ediciones de Alfredo Zayas, Roberto Agramonte y Alicia Conde.