Es posible que ya hayas sentido Octubre, sólo que aún no lo sabes. La autora ha creado un mundo real que puedes leer en el vagón del tren, en la cama, entre descanso y descanso. Un mundo en el que tú has vivido y que recoge pensamientos que tú también has tenido. Es una mirada introspectiva a los sentimientos y sus etapas, una carta abierta al amor propio, romántico y tóxico; a veces muy poético y otras veces no tanto. Un llamamiento a la importancia del papel femenino en el mundo artístico y una búsqueda de la inspiración que a veces tanto perdemos por el camino.