Este ebook presenta "Política", con un indice dinámico y detallado. La Política de Aristóteles es el estudio que este filósofo dedica a completar el conocimiento del 'bien humano' que había iniciado en la ética. De hecho, para Aristóteles, ética y política son dos aspectos de un mismo conocimiento práctico que se ocupa del bien y que se rige por la prudencia. Si la ética se ocupa del bien del individuo, dedicando una atención especial al significado y ejercicio de las virtudes como medio para alcanzarlo, la política se ocupa de 'un bien mayor' -según las propias palabras de Aristóteles-, pues trata del modo de alcanzar el bien de toda la comunidad.
La vinculación estrecha, casi identidad, de ética y política se pone de manifiesto, cuando recordamos el papel que juegan en la vida del individuo y en su relación con los demás dos virtudes ampliamente tratadas en la ética: la justicia y la amista.
Así, por un lado, la idea de 'justicia legal' hace patente la dependencia de la ética respecto de la política: puede afirmarse que la virtud total es la obediencia a las leyes, pues las leyes establecen los modos virtuosos de comportarse en las relaciones con los demás; ser virtuoso es obedecer las leyes. Por otro lado, la distribución de cargos y cargas en el Estado ha de hacerse de acuerdo con las exigencias de la justicia (justicia distributiva).
Pero, la identificación de ética y política, se funda en último término, en un rasgo inherente de la naturaleza humana: su sociabilidad. Esto es entendido por Aristóteles como la exigencia de la naturaleza humana de vida en común, para que el ser humano individual pueda alcanzar su pleno desarrollo y perfección y, con ello, una vida buena y feliz, que como vimos en la ética es el fin último de toda acción humana.
El Estado, que es la comunidad más perfecta, tiene como fin propio hacer posible que cada ciudadano logre esa vida buena y feliz, plenamente satisfactoria. Objetivo que separa su concepción del Estado tanto de la de los sofistas, como de la concepción utópica de Platón.
La vinculación estrecha, casi identidad, de ética y política se pone de manifiesto, cuando recordamos el papel que juegan en la vida del individuo y en su relación con los demás dos virtudes ampliamente tratadas en la ética: la justicia y la amista.
Así, por un lado, la idea de 'justicia legal' hace patente la dependencia de la ética respecto de la política: puede afirmarse que la virtud total es la obediencia a las leyes, pues las leyes establecen los modos virtuosos de comportarse en las relaciones con los demás; ser virtuoso es obedecer las leyes. Por otro lado, la distribución de cargos y cargas en el Estado ha de hacerse de acuerdo con las exigencias de la justicia (justicia distributiva).
Pero, la identificación de ética y política, se funda en último término, en un rasgo inherente de la naturaleza humana: su sociabilidad. Esto es entendido por Aristóteles como la exigencia de la naturaleza humana de vida en común, para que el ser humano individual pueda alcanzar su pleno desarrollo y perfección y, con ello, una vida buena y feliz, que como vimos en la ética es el fin último de toda acción humana.
El Estado, que es la comunidad más perfecta, tiene como fin propio hacer posible que cada ciudadano logre esa vida buena y feliz, plenamente satisfactoria. Objetivo que separa su concepción del Estado tanto de la de los sofistas, como de la concepción utópica de Platón.
Dieser Download kann aus rechtlichen Gründen nur mit Rechnungsadresse in A, B, BG, CY, CZ, D, DK, EW, E, FIN, F, GR, H, IRL, I, LT, L, LR, M, NL, PL, P, R, S, SLO, SK ausgeliefert werden.