Una afilada reflexión sobre el mercantilismo al que se somete actualmente a la obra artística, sobre la vida del creador y las inquietudes de quienes ven sujeto su arte a la oferta y la demanda. Nuestro protagonista, Daniel, es mitad detective y mitad pintor, a su pesar. Cuando recibe el encargo de recuperar los tres Picassos que le han robado a un potentado industrial catalán, Daniel no dudará en aceptar el caso. Sin embargo, todo se complicará cuando aparezcan dos cadáveres que nadie esperaba.-