Otoño de 1980: una bulliciosa mañana de noviembre Layla, embarazada de su segundo hijo, su marido Jamal y su pequeña hija llegan a la estación central de Múnich. A sus espaldas queda su huida de la guerra en un Afganistán castigado duramente; delante de ellos se abre un futuro incierto en Alemania. En su maleta la joven familia sólo lleva los recuerdos de los días pasados y la esperanza en el futuro. Mientras el mundo contiene el aliento durante la Guerra Fría y sus consecuencias, Layla da a luz al primer hijo varón en Alemania. Layla se pregunta bien pronto qué significa realmente la palabra patria en tiempos de guerra y es consciente de que la contienda bélica les acompaña a ella y su familia en todos y cada uno de sus pasos. Wajima Safi hechiza al lector en cada una de las líneas de esta novela. Una narración extraordinaria que busca a su igual: melancólica, opulenta, enorme.