Aunque a la mayoría de las personas no se les educó para ser padres, lo cierto es que el seno del hogar es la mejor escuela para aprender sobre los temas del corazón, y cuando la familia hace bien la tarea, ésta resulta más placentera, más eficaz, y quien recibe amor es capaz de dar amor. Este y otros temas toca este libro, donde se respira sensibilidad de la primera a la última página.