Este libro surge como una propuesta de académicos y profesionales en relación con la actuación que la Educación Social puede desarrollar ante los retos que plantea el sistema educativo. Está pensado para todos aquellos docentes de educación superior interesados en mejorar la estructuración y los procesos formativos de los títulos de grado y posgrado. Además, puede resultar útil como una obra de consulta para profesionales de la Educación Social que trabajan en contextos educativos. El volumen está organizado en ocho capítulos de tal manera que se busca la coherencia y la continuidad de la propuesta. Tras un primer capítulo introductorio, en el que se conceptualizan términos clave de esta disciplina, se describe y define el ámbito educativo como integrante de áreas de acción de la Educación Social. Le siguen otros dos centrados en la figura del profesional de la Educación Social en el sistema educativo. Los pedagogos clásicos, considerados como los precursores de la Educación Social (Pedagogía Social), muestran vías de acción desde las cuales se llevaron a cabo experiencias socioeducativas con el fin de acompañar a personas de diferentes edades y en contextos variados para facilitar su inserción en su sociedad. En la actualidad, el profesional de la Educación Social se halla inmerso en un sinfín de proyectos educativos que se ofrecen fuera y dentro de los contextos escolares. Se describe la situación actual en el Estado español y, a partir de este mapeo, se analiza la disparidad por comunidades autónomas y su (des)regulación por parte de la administración educativa. Los cinco capítulos sucesivos responden de forma reflexiva la siguiente cuestión: ¿Cuál/Cuáles es/son las propuestas de actuación que se ofrecen desde diferentes posiciones en el ámbito socioeducativo a las situaciones que se viven en los centros educativos? Las múltiples respuestas ofrecidas desde perspectivas diversas enriquecen el contenido del libro a la vez que provocan otros interrogantes sobre acciones que podrían plantearse a fin de facilitar que la comunidad educativa sea protagonista de su propia historia en relación con el tiempo y la sociedad en la que se inserta.