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El libro que 'creó' el barrio chino: un best seller de los años veinte que no se reeditaba en su versión original en castellano desde antes de la Guerra Civil. Una crónica de la zona portuaria de Barcelona, entre la Rambla y el Paralelo, sacudida por los conflictos sociales, hormigueante de la vida menuda de pequeños traficantes, taberneros y prostitutas. Mediante las técnicas del periodismo de investigación y de infiltración, y utilizando técnicas narrativas, Francisco Madrid captó la transformación del barrio: del vicio y el pistolerismo como formas elementales de supervivencia, al…mehr

Produktbeschreibung
El libro que 'creó' el barrio chino: un best seller de los años veinte que no se reeditaba en su versión original en castellano desde antes de la Guerra Civil. Una crónica de la zona portuaria de Barcelona, entre la Rambla y el Paralelo, sacudida por los conflictos sociales, hormigueante de la vida menuda de pequeños traficantes, taberneros y prostitutas. Mediante las técnicas del periodismo de investigación y de infiltración, y utilizando técnicas narrativas, Francisco Madrid captó la transformación del barrio: del vicio y el pistolerismo como formas elementales de supervivencia, al gangsterismo y los clanes europeos de la delincuencia organizada. Ofrece panoramas veraces de burdeles, locales nocturnos, comercio de cocaína, camas calientes. Y retratos de personajes inigualables: 'madames', travestidos, pistoleros, fabricantes de Terrassa y Sabadell en el torbellino de la mala vida. Esta edición, que ha contado con la colaboración de la familia del escritor, pone orden a los textos de 'Sangre en Atarazanas', los amplía con una serie de reportajes inéditos sobre la trata de blancas y establece un juego literario y visual entre dos grandes periodistas: Francisco Madrid y el fotógrafo Gabriel Casas i Galobardes.
Autorenporträt
Francisco Madrid (Barcelona 1900 – Buenos Aires, 1952) es una figura fundamental de la bohemia previa a la Guerra Civil. A los 16 años empezó a colaborar en la prensa de izquierdas: uno de sus artículos le llevó a la cárcel, donde conoció a sindicalistas y hampones. Esta circunstancia le abrió las puertas de la ciudad prohibida y de las personalidades más íntegras y activas de lo social. Escribió las crónicas que conforman Sangre en Atarazanas para la revista El Escándalo, utilizando técnicas propias del periodismo de investigación e infiltración.