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Escritos en la madurez literaria de Robert Pinget, a ratos perdidos entre el resto de su obra, "Señor Sueño", "Arado" y "El arnés" tienen como protagonista al señor Sueño, un jubilado que anota lo que siente y piensa, o lo que cree que ha pasado, no como si lo recordara, sino como si lo oyera. Ácido e irónico, a medio camino entre la prosa de su amigo Samuel Beckett y el humor de Buster Keaton, Pinget dio un peculiar encanto a esta novela (¿o diario?, ¿o colección de apotegmas?, ¿o borrador?), su inclasificable obra maestra. "Si fuera posible deslizar aquí algunas líneas pe- netrantes sobre el…mehr

Produktbeschreibung
Escritos en la madurez literaria de Robert Pinget, a ratos perdidos entre el resto de su obra, "Señor Sueño", "Arado" y "El arnés" tienen como protagonista al señor Sueño, un jubilado que anota lo que siente y piensa, o lo que cree que ha pasado, no como si lo recordara, sino como si lo oyera. Ácido e irónico, a medio camino entre la prosa de su amigo Samuel Beckett y el humor de Buster Keaton, Pinget dio un peculiar encanto a esta novela (¿o diario?, ¿o colección de apotegmas?, ¿o borrador?), su inclasificable obra maestra. "Si fuera posible deslizar aquí algunas líneas pe- netrantes sobre el pasado del señor Sueño que dieran al personaje un interés retroactivo por así decirlo, se haría. Pero es imposible y la razón de ello no puede darse."
Autorenporträt
Robert Pinget (1919-1997) nació en Ginebra y, según su propio testimonio, tuvo una infancia feliz. Aprendió a tocar el violonchelo, ejerció de abogado y en 1946 abandonó Suiza para instalarse en París, donde se dedicaría a la pintura y la literatura. Considerado miembro fundador del Nouveau Roman, junto con Robbe-Grillet, Butor, Ollier, Simon y Sarraute, fue, sin embargo, un marginal de las escuelas y corrientes, como su principal amigo y compañero de aventura literaria Samuel Beckett, que en 1960 adaptó al inglés su obra radiofónica La Manivelle con el título The Old Tune. Autor de una vasta obra (entre la que destacan L'inquisitoire, Premio de la Critique en 1962, Quelqu'un, Premio Femina en 1965, Fable, de 1971, Du nerf, de 1990 y De rien, publicada en 1991 con ilustraciones de Eduardo Arroyo) no fue, no obstante, sino un personalísimo escritor secreto, alejado de la agitación mediática y de los cenáculos teóricos.