Juan aprendió pronto que con su alter ego podría comerse el mundo. Todo iba bien hasta que la prensa amarilla londinense empezó a cuestionarse por qué no había fotos en la solapa de su libro o en las contraportadas de sus libros. Empieza la carrera de un escritor para esconder su identidad. El encuentro con el amor que nunca pensó que se merecía. En Te encontré el maestro se convierte en aprendiz y un enamorado a la vieja usanza. Los sueños a veces se hacen realidad y son más grandes de lo que pudimos llegar a soñar.