La obra centra su atención en el liderazgo ejercido por Fidel durante los años que condujo al pueblo cubano por la senda de la independencia, la soberanía y el antimperialismo. Esta obra es continuidad de "Un niño llamado Fidel Alejandro" y "Un joven llamado Fidel Alejandro" que ofrecen facetas de la vida del Comandante en Jefe. Expresada a través de un lenguaje claro, sencillo y de logradas ilustraciones, el texto es resultado de una profunda indagación histórica acerca del líder de un pueblo que sigue y seguirá reconociéndolo como tal. La obra posee un valor histórico y un lenguaje narrativo impecables.