¿Qué entendemos por víctima? ¿Quién la ha conducido a esa situación? ¿Qué lleva a una persona a someter a otra? ¿De qué depende que se conmuevan quienes no son víctimas? Estas y otras cuestiones son las que plantea Olga Belmonte en este ensayo, en el cual invita a los lectores a actuar desde la reflexión inteligente y serena. La autora pone en el centro la voz de las propias víctimas, muchas veces silenciadas, pero también la ausencia de palabras de quienes no pudieron narrar su experiencia. Un libro imprescindible para mirar de frente a un sufrimiento que nos devuelve la imagen de una sociedad que no ha conseguido evitarlo, y del cual podemos aprender sin justificarlo.