Piedras negras se sitúa en el epicentro de la burbuja inmobiliaria, con unos personajes codiciosos en un momento en que la riqueza parecía estar al alcance de cualquiera, y traza un retrato minucioso de esa época; sus modas, la generalización de las nuevas tecnologías, el gusto por la ostentación Y un tema polémico y muy presente en los medios, los niños robados durante la dictadura.