La hipertensión (HTA o HTA) es uno de los factores que afectan a la morbilidad y la mortalidad de las personas mayores, por lo que los responsables de las políticas sanitarias deben prestar más atención al control de la hipertensión en las personas mayores, el 18% de todas las muertes (9,4 millones en todo el mundo). Además, la hipertensión se considera un importante problema de salud en nuestra sociedad. La hipertensión no suele causar síntomas. Sin embargo, la hipertensión a largo plazo es un importante factor de riesgo de arteriopatía coronaria, ictus, insuficiencia cardiaca, fibrilación auricular, enfermedad vascular periférica, pérdida de visión, enfermedad renal crónica y demencia.Alrededor del 90-95% de los casos son primarios, definidos como hipertensión debida a un estilo de vida inespecífico y a factores genéticos.Los factores del estilo de vida que aumentan el riesgo incluyen el exceso de sal en la dieta, el exceso de peso corporal, el tabaquismo y el consumo de alcohol. Los cambios en el estilo de vida y la medicación pueden reducir la presión arterial y disminuir el riesgo de complicaciones de salud. Los cambios en el estilo de vida incluyen la pérdida de peso, la disminución del consumo de sal, el ejercicio físico y una dieta sana. Este libro se basa en la investigación original que se presentó en la Conferencia AiA15 (Conferencia ASA; 2015 Aging in America Conference), del 23 al 27 de marzo de 2015 en Chicago, Estados Unidos.
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