En la actualidad se vive en un momento histórico de profundas transformaciones en el que la sociedad avanza a ritmos acelerados y las Universidades deben renovarse en consonancia con los acontecimientos, es necesario tener presente que los estudiantes que hoy se forman en ellas, serán los creadores de los próximos tiempos. La Universidad debe lograr una formación de alta calidad en sus profesionales, preparándolos para actuar de una manera eficiente y eficaz, tanto en sus funciones como ciudadanos como en su desempeño profesional. La calidad de la educación debe revertirse, entonces, en la formación de un ser humano integral que pueda enfrentarse a su tiempo y solucionar los problemas de este. En la última década, las nuevas herramientas tecnológicas de la información y la comunicación han producido un cambio profundo en la forma en que los individuos se comunican e interactúan entre sí y han provocado cambios significativos en la industria, el comercio, la ingeniería y otros campos; teniendo también el potencial de transformar la naturaleza de la educación con respecto a dónde y cómo se produce el proceso de aprendizaje.