Los animales de otras especies, han sido nuestros compañeros, mensajeros, deidades, alimento y fuente de múltiples significados en nuestra vida a través de la historia. La explotación de la que son víctimas hoy en día, llamada "industria", para un solo fin, nuestro aprovechamiento; no es más que otro signo de nuestra percepción del mundo, de nuestro distanciamiento de la naturaleza. La reflexión acerca de nuestra relación con los animales no humanos es imperante. La bioética y la ciencia del bienestar animal, son las disciplinas esenciales que nos conducen a recapacitar sobre nuestro comportamiento y percepciones acerca de los animales no humanos; sin embargo, en momentos sus posturas se tornan contradictorias. Por lo tanto, es necesario analizar las raíces de ambas, comprender sus puntos de vista y sus congruencias, para sumar esfuerzos y no enfatizar sus discrepancias, con el fin de conducirnos hacia un nuevo paradigma en nuestra relación para con ellos y nuestro entorno.