La metáfora del caleidoscopio como un objeto que posibilita experimentar la diversidad de formas, colores y figuras, permite a los autores de este texto presentar al público lector un conjunto de visiones aplicadas a manera de ensayos; cada uno de los cuales está constituido por sus propias formas, colores y figuras. Así, cada ensayo se convierte en un objeto caleidoscópico que enfoca su estudio (cine, publicidad, comunicación, lenguajes urbanos, conceptos y tendencias) y lleva a cabo, procesos de análisis semiótico en busca del develamiento de las posibles significaciones que en ellos se concentran.