En el año 2014 empecé con el proyecto Memorias Cortantes, el cual abordo desde una experiencia personal de maltrato infantil. El mencionado proyecto consiste en las consecuencias que deja la violencia por parte de los padres frente a los menores en todo lo que es el desarrollo de su vida adulta y su crecimiento personal, entre las que se encuentran la baja autoestima, problemas de ansiedad, y tendencias violentas (en su mayoría a replicar la violencia sobre otras personas, ya sea verbal o físicamente). Invitando así a una reflexión sobre los métodos aplicados al momento de criar a un infante, y abriendo una posibilidad de sanación a quienes han vivido la experiencia de ser víctimas.