En esta obra se analiza el sentido positivo y negativo de la posmodernidad. Sus principales características como la cultura del narcisismo (Lasch) y la era del vacío (Lipovetsky) en la que la interioridad, la comunidad y la misión humana en el mundo sufren una gran depresión como ya mostró la Nueva Filosofía. Ahora, se trata de dar una respuesta positiva a esta gran recesión de la interioridad, la comunidad y la misión en este momento de la historia humana desde la buena nueva de Jesús de Nazaret y la tradición profunda cristiana como san Agustín, Kierkegaard y otros muchos. Así, se trata de recuperar la persona humana y su yo más auténtico (J. L. Marion) y renovar el pacto social de la solidaridad y la justicia para todos como nos proponen Habermas y Ratzinger en su famoso diálogo o el Papa Francisco tanto en El gozo del Evangelio como en la propuesta de una espiritualidad ecológica en Laudato si.