La calidad de la educación debe conducir a un compromiso asumido por las instituciones y al mismo tiempo debe transformarse en un hábito de las instituciones educativas e instalarse como proceso participativo de los actores involucrados en la organización. La presente investigación pretendió identificar diferencias en la percepción de la calidad del servicio universitario, además de descubrir las dimensiones con las puntuaciones más bajas tanto en alumnos, en docentes y en administradores de una universidad privada de Argentina. Se trata de un estudio de tipo cuantitativo, transversal y correlacional realizado entre los años 2012-2013. Para la recolección de información se utilizó una adaptación de las propuestas de Capelleras y Veciana, basados en el modelo SERVQUAL, y de Rubio Gómez, Aguilar Feijoo, Massa Sánchez, Maldonado y Ramírez Asanza, referentes a la adecuación de los programas, y a la efectividad de los procesos administrativos. La escala se aplicó a una muestra de 454 alumnos, 64 docentes y 13 administradores de la universidad. Se describen rangos promedios con diferencias significativas sobre la calidad global, y otros hallazgos relevantes.