El 25 de enero de 1999, un terremoto de 6,2 en la escala de ritcher y con epicentro en el municipio de Pijao (en el departamento del Quindío) sacudió el eje cafetero colombiano. Armenia, la capital del Departamento, fue la población más afectada. Para enfrentarlo la Presidencia de la Republica conformó el Fondo para la Reconstrucción del Eje Cafetero FOREC- que con una metodología sugerida por el BID, delegaba el proceso de reconstrucción en ONG s. Aquí se analiza un caso de ese proceso, en el cual confluyeron la lógica del modelo y las inconformidades de los damnificados, en una tensión en ocasiones mediada y otras alimentada por una ONG conformada, entre otros, por ex integrantes del M-19 (el grupo guerrillero colombiano que firmó acuerdos de paz en 1990) cuyos objetivos, más allá de la restitución de las viviendas y los barrios, propugnaban por la reivindicación de los más desfavorecidos como ciudadanos. Así, ese caso se convierte en una excusa para analizar el proceso de reconfiguración territorial a partir de los discursos, la ideología y las tensiones políticas emanadas o provocadas por esa ONG y que propiciaron la fundación del barrio Ciudadela Simón Bolívar.