Este trabajo es un estudio epidemiológico en una población femenina de la ciudad de Córdoba durante el año 2004. Su desarrollo pone en evidencia la relación existente entre el consumo de psicofármacos en las mujeres y los estereotipos de género. Esta perspectiva tiene como una de sus premisas que la violencia ejercida sobre la mujer tiene una larga historia de gestación, desarrollo, justificación y ocultación. Se incorpora en el análisis del consumo de los psicofármacos, el género, como constructo social que nos permite desarrollar conocimientos concretos sobre las situación de las mujeres.