La terminología usada dentro del discurso de justicia transicional no sólo ha sido indeterminada, sino también proclive a adhesiones insubstanciales que la han llevado a consolidar procesos de injusticia en espacios prolongados de tiempo. La falta de observación de las condiciones que fundamentan los contextos beligerantes, la omisión de estudio de aquellos intereses económicos, sociales y culturales que los actores poseen, la indiferencia a la perspectiva social respecto a la violencia y la justicia, entre otras, son causas fundamentales de las innumerables equivocaciones que se presentan en torno al buen manejo legal y legitimo que debe poseer una verdadera estructura aplicativa de justica transicional, que conlleve en ciencia cierta a la pacificación y armonía social perdidas dentro del conflicto.