El pragmatismo sostiene la existencia de un pluriverso plástico y dinámico. La racionalidad como expresión de la capacidad intelectiva y epistémica de los seres humanos es externada por el pragmatismo como un saber en permanente construcción, con base en la experiencia y la evaluación de sus consecuencias prácticas. El punto de unión entre el pragmatismo y el pensamiento jurídico está en la concepción de que las decisiones jurídicas de los magistrados del Poder Judicial estadounidense habrán de orientarse hacia sus efectos, sus consecuencias. Así, el pragmatismo jurídico estadounidense es una herramienta polimórfica para el desarrollo de los negocios y la economía de la potencia hegemónica del siglo XX y lo que va del XXI. He ahí los prolegómenos de la estadounidización de los criterios jurídicos internacionales, es decir, la extensión e influjo indiscutibles del pensamiento jurídico y las formas de desarrollo del common law estadounidense en la estructura del derecho internacional.