El autor dirige sus esfuerzos a incluir a la unidad de auditoria interna como una unidad asesora en el funcionamiento de la organización, sobre la base de exámenes de mantenimiento que apuntan a evaluar el cumplimiento de las disposiciones establecidas en cada uno de los procesos, poniendo énfasis en los procesos operativos como generadores de satisfacción de la comunidad y resalta los exámenes especiales de mejoramiento como el aporte sustancial de la unidad dado su condición de asesor de la organización y en función del criterio de eficiencia de los procesos; criterio aceptado por tratadista y organismos de control en el mundo.