Considerando que el capital humano (empleados) son el activo más importante de las organizaciones, es necesario optimizar las estructuras salariales para obtener el mayor provecho al gasto de nómina y a lo que el trabajador realmente percibe obteniendo eficiencias en el pago de las contribuciones, para esto se requiere buscar alternativas y una de las más utilizadas en las empresa de gran tamaño es la implementación de un plan de previsión social, que sea acorde a las necesidades de la empresa. Ya que esta trae beneficios fiscales, laborales y sociales que impactan a la empresa y al trabajador. Por supuesto que, para obtener los beneficios fiscales, se deben de cumplir con ciertos requisitos específicos tendiente a evitar abusos del aprovechamiento de estas prestaciones de Previsión Social. Sin embargo, a pesar de ser una estrategia que impacta positivamente en las organizaciones, normalmente las pequeñas y medianas empresas la desconocen o bien, desconocen sus beneficios, entre otras razones, por la falta de asesoría especializada y por la misma estructura con la que cuentan estas unidades económicas.