48,99 €
inkl. MwSt.
Versandkostenfrei*
Versandfertig in 1-2 Wochen
payback
24 °P sammeln
  • Broschiertes Buch

Los pueblos amerindios viven en gran medida hasta hoy con un pasado agrícola y una civilización que emana de ahí; el maíz es testigo que se a posesionado como uno de los tres más importantes del mundo, de origen netamente indígena, no debe de ignorarse que la civilización agrícola sea la única, existen reminisencias de recolectores, los pames,por ejemplo, tienen al chamal como símbolo que sustituye al maíz, hasta ahora hemos escrito poco sobre eso; la pretensión central es mostrar además de la civilización agrícola basada en el maíz, un nuevo orden de conocimiento con base en tres, en lugar de…mehr

Produktbeschreibung
Los pueblos amerindios viven en gran medida hasta hoy con un pasado agrícola y una civilización que emana de ahí; el maíz es testigo que se a posesionado como uno de los tres más importantes del mundo, de origen netamente indígena, no debe de ignorarse que la civilización agrícola sea la única, existen reminisencias de recolectores, los pames,por ejemplo, tienen al chamal como símbolo que sustituye al maíz, hasta ahora hemos escrito poco sobre eso; la pretensión central es mostrar además de la civilización agrícola basada en el maíz, un nuevo orden de conocimiento con base en tres, en lugar de la dualidad, básicamtne occidental y por ende de la razón, nueva filosofía y teología que he desarrollado en mi libro Tridimensión cósmica otomí (2007) y que actualmente sigo trabajando, Con esto se trabaja para ofrecer un nuevo sistema de conocimiento al mundo, con mucho mas factibilidad que los de caracter economsista que ofrecen en este tiempo por ejemplo el tan sonado desarrollo sustentable.
Hinweis: Dieser Artikel kann nur an eine deutsche Lieferadresse ausgeliefert werden.
Autorenporträt
Profesor-investigador nacional, ha impartido cerca de 200 conferecias; especialista en otomíes,pames,chichimecas, mazahuas desde 1990; actualmente elabora una nueva teosofía con base en los pueblos amerindios y en la lengua que él entinde otomí