El maní forrajero (Arachis pintoi) es una leguminosa de buena calidad para la alimentación de rumiantes, por su alto consumo y contenidos de proteína cruda y digestibilidad. Además de su perfil nutricional, tiene la capacidad de fijar nitrógeno atmosférico, y mejorar el contenido de materia orgánica del suelo. En alimentación de terneras, permite reducir el uso de alimento balanceado sin afectar la tasa de crecimiento, de igual forma, en animales en producción, logra sustituir entre 56 y 78% el suplemento energético y proteíco. El maní forrajero es una leguminosa que se logra ensilar con y sin aditivos, pero su perfil nutricional se puede afectar por el ecotipo empleado, la frecuencia de corta del material, el grado de deshidratción y la adición de melaza. El proceso fermentativo se logra estabilizar en los primeros 10 días de iniciado el proceso, periodo que establece la calidad del ensilaje. Por tal motivo, se considera una alternativa de conservación de forrajes para ser utilizados en la alimentación de animales rumientes, para mejorar los contenidos de proteína cruda y reducir la compra de insumos en el sistema de producción.